Alexia Putellas, capitana y figura, fue una de las tantas jugadoras que publicaron un comunicado en sus cuentas oficiales de las redes sociales, donde sentaron posición.
«Lo expresado el 15 de septiembre deja claro y sin ninguna opción a otra interpretación nuestra firme voluntad a no ser convocadas por motivos justificados. Estas afirmaciones siguen plenamente vigentes», señala la nota oficial de las futbolistas.
Putellas y el resto de sus compañeras renunciaron al seleccionado hasta tanto no aparezcan cambios radicales en la RFEF como consecuencia del beso sin consentimiento del ex presidente Luis Rubiales a la delantera Jenni Hermoso, en la premiación del Mundial de Nueva Zelanda/Australia 2023.
Horas antes, la RFEF instó a las jugadoras a sumarse a «un cambio», a través de otro comunicado: «Garantizamos un entorno seguro a las jugadoras y apostamos por un clima de confianza mutua para que podamos trabajar juntos y logremos que el fútbol femenino siga progresando con mucha más fuerza».
Tomé citó a 23 jugadoras de cara a la doble fecha de la Liga de Naciones: viernes 22 de septiembre ante Suecia y martes 26 frente a Suiza, pero de inmediato hubo respuesta de las futbolistas.
María Pérez, Mariona Caldentey, Ona Batlle, Misa Rodríguez, Teresa Abelleira, Esther González, Eva Navarro, Oihane Hernández y Amaiur Sarriegi también se sumaron a la postura de Putellas.
«Desde AFE apelamos a la RFEF a que cese en su empeño de presionar a las jugadoras y se plantee el por qué de la pérdida de confianza y apoyo por parte de muchas de las futbolistas convocadas», agrega el comunicado.
Por su parte, la jugadora sueca Filippa Angeldahl también apoyó la causa de sus colegas españolas y deslizó la posibilidad de «un boicot» al partido del próximo viernes.