En Chaco participaron un total de 23.725 estudiantes de 982 escuelas primarias.
Este año, el dispositivo presentó dos novedades respecto a años anteriores: por un lado, en cada sección a ser evaluada, un docente respondió también un cuestionario especial, denominado Cuestionario para Docentes.
Por otra parte, un grupo reducido de escuelas y secciones -con carácter muestral- debieron responder, además de los ítems de respuesta múltiple, preguntas abiertas o de construcción de respuesta, en Lengua o Matemática, en las que, en lugar de seleccionar una alternativa entre las opciones dadas, los estudiantes debieron desarrollar su respuesta.
Cabe recordar que los resultados de este tipo de evaluaciones están disponibles el año siguiente de la realización del operativo.
«Se realiza un trabajo más bien de reconocimiento de la estructura del formato de la prueba para que los chicos y chicas tengan claro de qué manera van a ser evaluados, y después viene el proceso específico de capacitación para lo que es la aplicación del operativo, que también está a cargo del departamento y que lo realizamos durante todo el mes de agosto en todas las direcciones regionales educativas de la provincia», precisó.
Este trabajo involucra tanto a coordinadores de cabecera, que son quienes reciben los materiales para distribuirlos en las escuelas; veedores, que por lo general son los directores de cada escuela, y aplicadores, que son quienes toman las evaluaciones el día de la aplicación.