Este lunes empezaron los 10 días más importantes de la temporada para Boca. Se vienen las semifinales de la Copa Libertadores ante Palmeiras y el Superclásico frente a River por la Copa de la Liga Profesional, y es algo que ilusiona a todos los hinchas del Xeneize. Y como para descomprimir (o agregar) la presión, el que salió a hablar públicamente fue Juan Román Riquelme, el vicepresidente e ídolo del club, que no esquivó el bajo rendimiento del equipo, aunque lo justificó por el pensamiento «inconsciente» de los futbolistas ante los desafíos que se vienen.
«Es una semana muy bonita para los jugadores, por el partido del jueves, el Superclásico del domingo, el otro jueves en Brasil, es lo que uno sueña de chiquito, así que es muy lindo. Tenemos un grupo de jugadores de gente grande, con varios chicos que se han acostumbrado a competir, que tienen la cabeza puesta en este partido del jueves y es lógico que tengan partidos buenos como en Santiago del Estero, después bajen un poco porque no es fácil estar en semifinales de la Libertadores y se encuentran cerca, nos quedan tres partidos«, aseguró.
Y, enseguida, completó: «En todos los trabajos hay que mejorar. Yo sé que acá habla mucho el técnico con los jugadores más grandes, yo desde mi lugar lo único que te puedo decir es que cuando estás en semifinales de la Libertadores tenés la cabeza en eso. Si el domingo jugabas por el torneo argentino y a los tres días lo hacías por la Copa, inconscientemente no sé por qué, en el segundo partido estabas con todas las luces y en el primero no. Nos está pasando eso, también por lo que se vive en nuestra cancha que es único: porque la gente también pide la Copa, como pasó con Lanús el sábado».
«Que tienen y quieren jugar mejor, no voy a decir que no, y si queremos competir hasta el final en la Libertadores sabemos que tenemos que hacer partidos de buen nivel. Vamos a competir con un equipo deun país que está fuerte económicamente, que se refuerzan bien, y a nosotros nos da mucha ilusión y orgullos estar entre los tres equipos de Brasil. Yo quisiera jugar uno de esos partidos, es un sueño», resumió respecto de la poca confiabilidad que entregó el equipo en el 1-1 ante el ‘Granate’ en La Bombonera.
«El jugador de fútbol toma decisiones en segundos, uno quiere que el equipo juegue bien, que el hincha esté contento. El fútbol argentino es muy parejo, cuando un equipo gana dos o tres partidos decimos que es una maravilla, después pierde dos o tres y la gente está nerviosa. El fútbol argentino es tan hermoso que tiene eso, como le pasó a Independiente o Huracán. Es muy difícil mantener el juego durante un año o dos. Diría que es imposible. Es divertido, es el más difícil de todos, si jugás bien acá se te hace más fácil en otros lados», agregó.
Riquelme también se encargó de dar su fórmula ante la serie frente a Palmeiras, un abonado a las definiciones de la Libertadores en los últimos años, y que se quedó con el bicampeonato en 2020 y 2021, además de su primera estrella en 1999. «Hay que defender bien para atacar bien», avisó el ’10’.
«Si voy pensando en cuando nos tocaba jugar a nosotros, las Copas eran de enero a junio, cuando venías de ganar el torneo argentino, lo dejabas de lado y te enfocabas en la Libertadores. Este equipo nuestro viene de ser bicampeón del fútbol argentino, le ganamos a Patronato otra final en marzo, seguimos en Copa Argentina y estamos en semis de la Libertadores representando al fútbol argentino. Cuando juega bien hay que mejorar, cuando no lo hace tan bien también tiene que mejorar. Pero los partidos de Libertadores son diferentes a todos, te hace competir más. No tengo dudas que haciendo las cosas bien y si tenemos las cosas claras vamos a tener muchas chances de ganar: hay que defender bien, para atacar bien«, remarcó.
Las semifinales de la Copa Libertadores quedaron con el Superclásico en medio de ambos encuentros de la serie, lo que fue un motivo de opinión para Riquelme, que si bien lo calificó como un «sueño» para cualquier futbolista antes la chances de jugar ese tipo de duelos, aclaró que los responsables de la Liga Profesional deberían haberlo tenido en cuenta al momento de organizar el calendario.
«Jugar el clásico no es algo extraño, es maravilloso, es un lujo. Yo como futbolista sueño con que me elija para un Superclásico y estar en una semifinal de la Libertadores. Todos los equipos del fútbol argentino quisieran estar donde estamos nosotros. A partir del viernes pensaremos en el Superclásico, con un gran rival, que tiene grandes jugadores. Estamos en el lugar que queríamos estar, en el momento que queríamos estar. Sí por ahí teníamos que haber mirado que la semifinal de Libertadores ya estaba la fecha y los clásicos podrían haberse jugado en otra semana, pero estamos felices de donde estamos», afirmó.
También habló sobre el arbitraje, teniendo en cuenta que en las próximas horas se conocerá al designado por AFA para el Boca-River del domingo en el estadio La Bombonera, que saldría de Yael Falcón Pérez y Nicolás Ramírez.
«Los árbitros intentan hacer las cosas lo mejor posible, nosotros como club buscamos competir tanto en la Liga argentina como en la Libertadores, y lo que queremos es que si se equivoca el árbitro sea para los dos lados», sostuvo.
Por último, Riquelme apuntó a dos nombres particulares dentro del plantel, uno de los experimentados y otro de los más jovenes como Edinson Cavani y Valentín Barco.
«Los corre a todos, compite al máximo, le podés decir que erró una situación, pero es un ejemplo para los más chicos como Zeballos, Barco, Langoni, Medina, es una maravilla tenerlo a Cavani y ojalá lo puedan aprovechar», aseguró sobre el delantero uruguayo, que solo convirtió un tanto desde su arribo al Xeneize.
Y sobre el ‘Colo’ Barco, remarcó: «Le está pasando lo que le pasa a todos, que al comienzo arrancan de maravilla, después tiene partidos malos hasta que después se vuelve regular como le pasó a Medina, que fue el primero que debutó con nosotros y ahora es una maravilla».